El 30 de noviembre en Barcelona tuvo lugar La Gran Evasión, un cinematográfico concurso en el que 100 personas, previamente seleccionadas entre todos los inscritos en www.lagranevasion.es, compitieron por escapar del World Trade Center de Barcelona. Una innovadora campaña de CP Proximity que consiguió con creces su objetivo: generar mucho ruido y repercusión mediática con un presupuesto limitado.
Un estomatólogo, una cocinera, un inversor de capital de riesgo, un funcionario, un bombero, una profesora, un taxista, una secretaria, una directora general… Todas estas personas tienen algo en común: están estresadas y necesitan evadirse. Por eso, decidieron inscribirse en la Gran Evasión.
Bongo es una peculiar empresa que se dedica a vender “bonos de evasión”, más 400 experiencias únicas, repartidas en 14 cajitas ideales para hacer regalos diferentes. Muy conocida en Bélgica, Bongo llegó a España hace unos meses y necesitaba conseguir en poco tiempo y con poco presupuesto mucha notoriedad. Os presentamos la Gran Evasión.
Cientos de espectadores
Los 100 seleccionados entre los más de 1000 inscritos en la web www.lagranevasion.es, llegaron al World Trade Center con su pareja, una maleta de fin de semana y un único objetivo: ser el primero en escapar del edificio para conseguir el Big Bongo. Qué experiencias incluía el Big Bongo y qué iba a pasar en el interior del edificio era para todos una incógnita.
Junto con ellos, más de 400 personas se personaron también a las 6 de la tarde en el World Trade Center, para intentar conseguir alguna de las últimas plazas a sorteo. Una convocatoria espectacular teniendo en cuenta que los requisitos no eran pocos: venir con pareja, traer una maleta, y tener disponibilidad para viajar ese mismo fin de semana.
A las 7 de la tarde, y tras el sorteo de las últimas plazas, los finalmente 107 concursantes, entre los que había un actor infiltrado y un reportero de un programa nacional, entraron en el interior de las oficinas. La Gran Evasión había empezado.
Primer día de trabajo
Allí se encontraron con un espectacular montaje que recreaba la “típica” gran empresa americana de los años 80 con todos sus personajes: la recepcionista cotilla, el estricto supervisor, el gran jefe gruñón, la entrometida señora de la limpieza, las bordes de administración, el compañero pesado…
Y en este ambiente tuvieron que enfrentarse a un primer día de trabajo muy peculiar: seis tareas pendientes les estaban esperando- los típicos “marrones” de última hora que te impiden salir a la hora del trabajo- el primero en terminarlas, conseguiría el código de la salida y con ello se convertiría en el ganador del Big Bongo.
Para resolver estas tareas todos contaban con las mismas herramientas: un ordenador, una calculadora, bolis y un teléfono. Desde su lugar de trabajo, un estrecho y angustioso boxes con su número de participante, cada uno de ellos leyó las tareas y decidió en qué orden empezar a realizarlas, una intranet servía para validar cada respuesta.
Un sólo presupuesto correcto que debían encontrar y sellar en el departamento de administración, el regalo de navidad sorpresa para el jefe que debían adivinar mirando su despacho y la matrícula de su limusina multada que debían averiguar sin salir del edificio, un papel perdido en la sala de archivos y un inventario de material sin hacer… Viernes a última hora y tu pareja esperando fuera a que salgas del trabajo. ¿Quién no ha vivido alguna vez una situación parecida?.
Finalmente el ganador del Big Bongo fue Sabina Martínez, ingeniera de telecomunicaciones que trabaja en una importante consultoría. Ella y su acompañante, fueron recogidos en la plaza por una limusina y se les hizo entrega del Big Bongo: 3 experiencias Bongo que empezaron esa misma noche y acabaron el domingo: una estancia con encanto en el Hotel Claris, un bono bienestar que consistía en un masaje a domicilio y un romántico viaje a París.
Una campaña que se convierte en noticia
Como comenta Eva Santos, Directora Creativa Ejecutiva de CP Proximity, “el objetivo principal era crear una campaña que se convirtiera por su interés general en noticia. Un objetivo muy complicado de alcanzar pero que en este caso se ha conseguido”.
La campaña ha conseguido una repercusión mediática sorprendente: presencia en diarios gratuitos, diarios generales, entrevistas e incluso retransmisión en directo del evento por parte de las principales radios del país y en presencia de las principales televisiones catalanas y de ámbito nacional.
A ello se une la buena afluencia de público que consiguió el evento, más de 300 personas lo siguieron desde una pantalla gigante que se colocó en la plaza del World Trade Center y la sorprendente viralidad que se ha conseguido la acción en pocas semanas consiguiendo visitas en todas los continentes y generando comentarios en más de 100 blogs.
Un estomatólogo, una cocinera, un inversor de capital de riesgo, un funcionario, un bombero, una profesora, un taxista, una secretaria, una directora general… Todas estas personas tienen algo en común: están estresadas y necesitan evadirse. Por eso, decidieron inscribirse en la Gran Evasión.
Bongo es una peculiar empresa que se dedica a vender “bonos de evasión”, más 400 experiencias únicas, repartidas en 14 cajitas ideales para hacer regalos diferentes. Muy conocida en Bélgica, Bongo llegó a España hace unos meses y necesitaba conseguir en poco tiempo y con poco presupuesto mucha notoriedad. Os presentamos la Gran Evasión.
Cientos de espectadores
Los 100 seleccionados entre los más de 1000 inscritos en la web www.lagranevasion.es, llegaron al World Trade Center con su pareja, una maleta de fin de semana y un único objetivo: ser el primero en escapar del edificio para conseguir el Big Bongo. Qué experiencias incluía el Big Bongo y qué iba a pasar en el interior del edificio era para todos una incógnita.
Junto con ellos, más de 400 personas se personaron también a las 6 de la tarde en el World Trade Center, para intentar conseguir alguna de las últimas plazas a sorteo. Una convocatoria espectacular teniendo en cuenta que los requisitos no eran pocos: venir con pareja, traer una maleta, y tener disponibilidad para viajar ese mismo fin de semana.
A las 7 de la tarde, y tras el sorteo de las últimas plazas, los finalmente 107 concursantes, entre los que había un actor infiltrado y un reportero de un programa nacional, entraron en el interior de las oficinas. La Gran Evasión había empezado.
Primer día de trabajo
Allí se encontraron con un espectacular montaje que recreaba la “típica” gran empresa americana de los años 80 con todos sus personajes: la recepcionista cotilla, el estricto supervisor, el gran jefe gruñón, la entrometida señora de la limpieza, las bordes de administración, el compañero pesado…
Y en este ambiente tuvieron que enfrentarse a un primer día de trabajo muy peculiar: seis tareas pendientes les estaban esperando- los típicos “marrones” de última hora que te impiden salir a la hora del trabajo- el primero en terminarlas, conseguiría el código de la salida y con ello se convertiría en el ganador del Big Bongo.
Para resolver estas tareas todos contaban con las mismas herramientas: un ordenador, una calculadora, bolis y un teléfono. Desde su lugar de trabajo, un estrecho y angustioso boxes con su número de participante, cada uno de ellos leyó las tareas y decidió en qué orden empezar a realizarlas, una intranet servía para validar cada respuesta.
Un sólo presupuesto correcto que debían encontrar y sellar en el departamento de administración, el regalo de navidad sorpresa para el jefe que debían adivinar mirando su despacho y la matrícula de su limusina multada que debían averiguar sin salir del edificio, un papel perdido en la sala de archivos y un inventario de material sin hacer… Viernes a última hora y tu pareja esperando fuera a que salgas del trabajo. ¿Quién no ha vivido alguna vez una situación parecida?.
Finalmente el ganador del Big Bongo fue Sabina Martínez, ingeniera de telecomunicaciones que trabaja en una importante consultoría. Ella y su acompañante, fueron recogidos en la plaza por una limusina y se les hizo entrega del Big Bongo: 3 experiencias Bongo que empezaron esa misma noche y acabaron el domingo: una estancia con encanto en el Hotel Claris, un bono bienestar que consistía en un masaje a domicilio y un romántico viaje a París.
Una campaña que se convierte en noticia
Como comenta Eva Santos, Directora Creativa Ejecutiva de CP Proximity, “el objetivo principal era crear una campaña que se convirtiera por su interés general en noticia. Un objetivo muy complicado de alcanzar pero que en este caso se ha conseguido”.
La campaña ha conseguido una repercusión mediática sorprendente: presencia en diarios gratuitos, diarios generales, entrevistas e incluso retransmisión en directo del evento por parte de las principales radios del país y en presencia de las principales televisiones catalanas y de ámbito nacional.
A ello se une la buena afluencia de público que consiguió el evento, más de 300 personas lo siguieron desde una pantalla gigante que se colocó en la plaza del World Trade Center y la sorprendente viralidad que se ha conseguido la acción en pocas semanas consiguiendo visitas en todas los continentes y generando comentarios en más de 100 blogs.
Si quieres ver el vídeo:
2 comentarios:
En la www.lagranevasion.es ya se pueden ver los vídeos del evento, entrad vale la pena
En la www.lagranevasion.es ya se pueden ver los vídeos del evento, entrad vale la pena
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